Sábado 25 de Noviembre. Sorgin gaua '06. Festi alternativo organizado por la distribuidora anticomercial Sorginkale Banaketak. En Zizur Nagusia.
A la mañana siguiente del concierto de Bilbao, nos fuimos bastante pronto para Zizur, y antes de la comida estábamos allí, aunque no hubo mucho que comentar. Eso sí, la comida que había preparado no-se-quien (y algo que habíamos llevado nosotros) estaba buenísima.
Toda una tarde da mucho de sí, así que, además de poner el puesto desde bien pronto y estar todo el rato alguien en él, pudimos dar un paseo por Zizur-urbanización (como un pueblo pero más de palo), hablar con unxs cuantxs conocidxs y otrxs nuevxs, saludar a nuestro amigo Crespo y ver una parte de la charla que había ido a dar, tomar y tomar... Fuera había un maratón de conciertos que congregaba a bastante peña, pero que no llegamos a ver.
Los conciertos empezaron puntuales, y esa fue la tónica de toda la noche: todo estaba super organizado y marchó según había sido previsto, como pocas veces habíamos visto. Como ya tenemos bastantes enemigos, no diremos nada de algún grupo que se pasó un poco de listo y lo dejaremos para otras veces. El sonido no era espectacular a pesar del esfuerzo, porque era un pabellón de frontón que generaba mil ecos, pero aún así había alguna que otra zona donde se podía escuchar bien la música.
Durante el concierto, el pabellón estaba hasta arriba, una pena que no sonara mejor porque eso hubiera elevado la intensidad fijo. Durante el resto de la noche, siguió habiendo mucha gente igualmente, aunque la gente miraba más que participaba del concierto, dándose algunos buenos momentos durante la actuación de Tanghana's show, que sonaron cañon a pesar de los ecos del lugar.
En un momento dado, un grupo de teatro llevó a cabo una "performance" de un akelarre, muy logrado y que dió la nota atípica a la noche. No tan atípicos fueron algunos gritos de Gora lo que ya sabeís tras la lectura por parte de Segi de un comunidado, que nos provocan bastante rechazo desde nuestra óptica libertaria y que creemos que estaban fuera de lugar... o igual eramos nosotros los que lo estabamos, quien sabe.
Sea como sea, bien entrada la madrugada nos fuimos a dormir al gaztetxe de Zizur, lleno de compas durmiendo también, y aunque la luz estuvo encendida toda la noche, pudimos dormir tan tranquilamente...
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